lunes, 11 de junio de 2007

Lluis LLach-Viatge a Itaca



No sé bien explicar el vértigo que siento al sentarme a escribir sobre este mítico disco, ni la responsabilidad que pesa sobre mí.

Cuando Lluis Llach publicó este disco, yo tenía 12 años, Franco aún vivía y yo no tenía ni la más remota idea de quién era él, aunque en ese mismo año había caído en mis manos mi primera guitarra, que mis padres me habían regalado. Tres años después, en 1978 yo había comenzado a musicar casi toda la poesía que caía en mis manos, sin tener ni idea que eso que yo intentaba hacer era algo que ya hacían mucho mejor que yo otros músicos.

Primero fue aquel mítico “Gener-1976”, disco también de Llach cuando yo comprendí que aquella era la música que a mi me gustaba, lo que yo quería oír, a lo que me quería dedicar. Inmediatamente después cayó en mis manos el “Campanades a morts” y poco después ya escuché este impresionante “Viatge a Itaca”, que curiosamente era un disco anterior a los otros dos.

Nos encontramos con un formato de disco que Lluis Llach repetiría varias veces después (Campanadas a morts, El meu amic el mar, Verges-50, I amb el somriure la revolta…), donde había una primera cara del disco (entonces de vinilo) con un único tema, a veces es una única canción dividida en partes y una “Cara-B” donde aportaba canciones que apenas nada tenían que ver con lo anterior, como es este caso.

Con este disco inauguró también aquello que muchos en aquel entonces llamaron “poemas sinfónicos”, ya que la música contaba con una enorme expresividad y aportaba múltiples sonidos muy cercanos a las sinfonías, muchos más cercanos a la música clásica en general que a la canción popular, referente principal hasta aquel momento.

Con este disco podremos considerar que el cantautor de Verges (Girona) alcanzó su mayoría de edad musical.

La “Cara-A” el disco incluye el “Viatge a Ítaca” completo, dividido en 4 partes, que forman un todo. Con letra de Kavafis, traducidos al catalán por Carles Riba, nos encontramos con un magnífico tema, navegando entre lo épico y lo poético, con argumentos corales.

“Viatge a Ítaca” ha sido una obra viva, ya que a lo largo de los años ha ido creciendo, madurando y adaptándosele como una segunda piel, como unos rasgos que ya jamás le podrán abandonar, ya que sin esta obra, LLach no sería Llach.

Para la grabación del disco contó con lo músicos que en aquel momento le acompañaban en sus conciertos, Laura Almerich, Tete Matutano, Martí Soler, Quique Cano, Santi Arisa, Manuel Camp, además de otros muchos, necesarios para una obra de esta dimensión.

Quedarnos tan sólo en la primera cara del disco, sería un pecado que jamás nos podríamos perdonar, ya que además de dos excelentes canciones como “Escriu-me aviat” (escríbeme pronto) y “Fins el mai” (hasta el nunca), nos encontramos con una de las canciones míticas suyas, “Abril-74”, inspirada en la “Revolución de los claveles” que acababa de vivir Portugal, una de sus temas más cantados, más coreados y más aclamados de su discografía.

CANCIONES

1. Ítaca
2. A força de nits
3. Escriu-me aviat
4. Fins el mai
5. Abril 74

Los arreglos corren a cargo de LLuis LLach y Manel Camp, un magnífico compositor y arreglista que le acompañó durante muchos años.

Francisco Espinosa

1 comentario:

Shibui dijo...

Uno de mis discos predilectos de Llach. Muchos críticos lo han considerado su primera obra maestra. Es una delicia y Kavafis es un poeta genial.
Ahora, creo que Lluis Llach sólo no hubiera conseguido llegar a hacer esta obra de arte discográfica sin los arreglos del gran pianista Manel Camp. Y también , pero en menor medida, el trabajo de los demás músicos.

Muy buenos los comentarios y buena elección "Viatge a Itaca".